a teoria da transparência

"Las fotos de Lucas Romanholli me recuerdan el mundo torcido por el sol de uno de sus paisanos, el escritor João Guimarães Rosa, creador y criador de un lenguaje nuevo, neológico, abrasivo, múltiple como la tierra brasileña y sus inacabables facetas.

Lucas, quien no por casualidad se hace llamar reconstruction, subvierte convenciones. Sin embargo, no es ésa su valentía. Lucas es valiente porque sueña y, como un rastreador, nos señala la senda para entrar en el sueño.

Tampoco es casual que administre uno de los grupos de fotografía más alucinados de Flickr: alan’s psychedelic breakfast, lema tomado del título de una canción del mejor disco de Pink Floyd, Atom Heart Mother.

Sostiene y ejerce la idea de que el arte “no es de ningún modo un objetivo, sino un punto de vista personal”, preñado de “insconstancia y extrañeza”. Por eso, porque está mareado de vida, prefiere la ambigüedad al realismo basto del documentalismo, la sugestión al simple auto de fe de la realidad.

Le he visto crecer de un manera prodigiosa, a una velocidad tan extrema que todos nos hemos quedado petrificados en su estela. En el camino lo ha roto todo, incluso su propia seguridad, para ofrecernos la vista sesgada, implosiva y surreal de lo cotidiano, el envés de lo que ven los ojos.

Sigo pensando en Guimarães Rosa, de cuyo nacimiento se celebra estos días el centenario (sin que en España, siempre tan ajenos a nuestros hermanos lusistas y brasileños, nos demos por enterados). Acaso Lucas haría suya esta formulación del autor de Grande Sertão: Veredas:

"Quando escrevo, repito o que já vivi antes.
E para estas duas vidas, um léxico só não é suficiente.
Em outras palavras, gostaria de ser um crocodilo
vivendo no rio São Francisco. Gostaria de ser
um crocodilo porque amo os grandes rios,
pois são profundos como a alma de um homem.
Na superfície são muito vivazes e claros,
mas nas profundezas são tranqüilos e escuros
como o sofrimento dos homens"